Al entrar en el período Taishō, la ciudad de Kioto era un hervidero de artistas que realizaban intercambios de ideas sobre el significado del arte, el papel del artista en la sociedad y sobre cuál era la manera adecuada de crear un arte “japonés”. Frente a los relatos más extendidos que sitúan a Tokio como el corazón absoluto de la modernidad cultural desde Meiji hasta nuestros días, la ciudad de Kioto continuó con el impresionante acerbo cultural que poseía y el material humano artístico con el que contaba para configurarse como el polo artístico que se levantaba en oposición a la hegemonía cultural capitalina. Kioto se convirtió en una ciudad de vanguardia artística. En esta charla me centraré en presentar ejemplos de los círculos pictóricos de la ciudad que nos ayudarán a entender la compleja y rica realidad de la ciudad durante las primeras décadas del siglo XX.
Daniel Sastre

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